Queremos un resultado perfecto en los proyectos, que sea prácticamente como fue redactado el objetivo de los términos de referencia. En el mundo social se suele idealizar los procesos, se cree que hay una fórmula perfecta, una ecuación que debe dar un resultado concreto y exacto, pero la maravilla de los procesos sociales es que no ocurre de esta forma.

Hay una respuesta clara y sencilla para esta situación, y es que en el mundo social trabajamos con personas, con seres humanos cambiantes, en búsquedas personales que varían diariamente para alcanzar un objetivo, para acercarse más al propósito individual o hasta del mundo. El solo hecho de trabajar con seres humanos hace que no haya una fórmula sino una carta de navegación que irá cambiando según el estado del tiempo, la marea, el mismo barco en la que se está navegando, los vientos y otros factores que a veces ni logramos prevenir o identificar.

Aprender a vivir en fluidez con este tipo de proceso permite realizar una ejecución más liberada de tensiones innecesarias, de cumplimiento de indicadores a veces imposibles de alcanzar. Fluir en los proyectos sociales no significa ser “relajados”, significa abrazar el cambio constante con el que viene incluido, sonreír ante el primer viraje que realice el barco y mirar muchas veces a nuevos horizontes, dejando atrás al antiguo norte que marcaba el inicio.

Aprendamos a valorar esos momentos en los que llega una o tres personas a espacios colectivos, así hubiéramos estado esperando 15 o 25 personas, empiezan a llegar los números a la cabeza, los indicadores y los refrigerios que van a dejar de entregarse, pero esas pocas personas eran las que debían estar en ese momento indicado. Aprender a comprender que todo es como debe de ser si todos los esfuerzos y trabajos fueron realizados con el cuidado, responsabilidad y amor que se debe de tener, es una actitud que todos deberíamos de tener y lo que realmente comienza a generar transformaciones e impacto.

Invitamos a todos los soñadores de proyectos, a los ejecutores, a “los de los números”, a los gerentes, a que comprendamos los procesos sociales como entidades en movimiento, en constante cambio, como entornos perfectos para la innovación y la sinergia de equipos. Como decimos en Indeleble ¿Qué pasaría si tú y yo logramos que 1 + 1 sea mayor que 2 para generar una gran transformación?